¡RENUNCIO!

 

Semana de berrinches

Hola de nuevo, esta semana ha sido un poco complicada tanto para mí como para Catalina. La más pequeña de la casa ha decidido que los berrinches de ahora en adelante son una buena opción para llamar mi atención.

Tía de familia

Ayer mientras tomaba un descanso después de estar todo el día editando pedí cuidarla para así pasar tiempo con ella, estuvimos un largo rato entre risas hasta que llegó el turno de jugar a las licuadoras descompuestas, ¿Se preguntarán cómo es ese juego? Básicamente es echarse en cualquier lado cómodo para tomar una siesta, sin embargo, los planes de Catalina eran otros, se tendió encima de mí mientras jugaba con mi cara hasta que llegó a mis lentes o como le digo yo, mis ojos artificiales porque sin ellos no veo. Una vez que obtuvo su nuevo objeto de entretenimiento, nos debatimos en una lucha de "devuelve lo que acabas de agarrar" hasta que sonó un ¡crack!, ese sonidito me indicó que algo había terminado mal.

¡Renunció! ¡Renuncio a mi cargo como tía! Fue lo primero que dije, “Ya no te voy a cargar y no jugaremos más”, esas palabras le causaban gracia a Catalina porque al ser pequeña aún no sabe lo que ello significa. Lo único que hacía era reír y mandarme besitos, pero no, su pequeño encanto no me iba hacer caer, las cosas no eran tan fáciles, pero, ¿A quién le miento? Después de una bailadita y un abrazo de oso volvimos a la normalidad. Finalmente, mis lentes fueron pegados con cinta y estarán así hasta que pueda ir por unos nuevos el fin de semana.

Pequeña reflexión

Lo sucedido me hizo reflexionar y me dije a mí misma, si tan sólo hubiera leído algunos consejos sobre bebés nada de esto estaría pasando.
Guerra avisada, no mata gente, así que ya saben, si tienen sobrinos y ustedes usan lentes, tengan cuidado porque pueden terminar con los suyos parchados.